¡Días relajantes en Córcega te esperan! Tal vez pases la mayor parte de tu viaje en la playa o en la piscina, en agradables cafeterías en Porto-Vecchio o haciendo senderismo en las montañas. Sea cual sea tu objetivo con el viaje, esperamos que puedas hacer uso de los siguientes consejos.
Si planeas viajar mucho por Córcega, definitivamente deberías alquilar un coche, ya que el transporte público no está muy desarrollado. Hay varias compañías de alquiler de coches cerca del aeropuerto de Figari, para que puedas relajarte el día de llegada y no preocuparte por los horarios de los autobuses.
Aprovecha la oportunidad de visitar Porto-Vecchio, una acogedora pequeña ciudad con unos 12.000 habitantes, conocida por sus hermosas playas de arena. Sobre todo, las playas de Palombaggia, Santa Giulia y Tamaricciu, ambas situadas justo al sur de la ciudad, son especialmente bonitas. Porto-Vecchio atrae a muchos turistas, con su parte alta de la ciudad con su ciudadela y hermosas vistas de la bahía, y su parte baja con el encantador puerto.
¿Quieres comer un buen almuerzo? Dirígete a Le Roi Théodore, cuyos platos de pescado atraen a visitantes de larga distancia.
Si quieres otras opciones de baño además de las playas, te recomendamos una visita a las piscinas de Cavu, a unas dos millas al norte de Porto-Vecchio, donde hay cascadas y piscinas naturales que invitan a baños refrescantes. También es acogedor caminar y si te apetece una descarga de adrenalina, ¡una visita a la pista de altura A Tyroliana puede ser emocionante! También hay restaurantes, tirolinas y bicicletas de montaña.
Si en cambio vas hacia el sur desde Porto-Vecchio, llegarás a la ciudad de Bonifacio, espectacularmente ubicada en un acantilado de piedra caliza sobre el mar. Dentro de las murallas de la ciudad, puedes pasear por callejuelas empedradas y encontrar restaurantes acogedores y contemplar la vista. Aquí estás prácticamente tan al sur como puedes llegar en Francia. A solo unas millas al sur se encuentra Cerdeña, que se puede llegar fácilmente en ferry en 50 minutos. Si quieres una dosis de Italia durante tus vacaciones, ¿tal vez un viaje de un día no está mal? En ese caso, asegúrate de reservar el viaje con anticipación, ya que puede estar completamente reservado durante el verano.
Si vas hacia el norte, llegarás a Bastia, una encantadora pequeña ciudad que vale la pena visitar, con su hermoso puerto de barcos pequeños bordeado de coloridas fachadas de casas. La ciudad también es una buena parada en el camino hacia Cap Corse, una península de cuatro millas de largo que se extiende hacia el norte desde la ciudad. El centro de la pequeña península consiste en una cresta montañosa de más de 1000 metros de altura que se extiende a lo largo de la península. Mientras conduces por aquí, te encuentras con encantadores pueblos, pequeñas bahías para bañarse y fantásticas oportunidades para tomar fotos en cada curva. La excursión es un viaje de un día perfecto desde Porto-Vecchio, donde puedes ver la mayor parte de lo que Córcega tiene para ofrecer, ¡en un área pequeña!
Si te interesa la historia, Ajaccio también puede valer la pena visitar. Esta ciudad es quizás más conocida como el lugar de nacimiento de Napoleón, y la casa donde nació ahora es un museo llamado Maison Bonaparte. Para conducir a Ajaccio, puedes seguir la carretera costera o, si te sientes aventurero, conducir por las sinuosas carreteras de montaña de la isla. Una buena opción es conducir la carretera de montaña allí y la carretera costera de regreso para ver tanto como sea posible. Entonces también pasarás por encantadores pueblos de montaña que son adecuados para descansos para tomar fotos y café.
Si quieres ver aún más del entorno montañoso, el sendero de senderismo GR20 es una muy buena opción. El sendero comienza en Conca al norte de Porto-Vecchio y se extiende 180 kilómetros en dirección noroeste. Se tarda unos 11-12 días en caminar de principio a fin, por lo que nuestra recomendación es que solo hagas un recorrido más corto durante el día. ¡Recuerda llevar mucha agua! El punto más alto del sendero de senderismo está a más de 2.200 metros de altura.
Para los que prefieren vivir Córcega desde la mesa, hay muchas cosas interesantes que probar. La isla es famosa por sus clementinas, que se cultivan principalmente en la costa este. Aquí, el clima hace que las clementinas no sean demasiado dulces, sino que tengan un buen equilibrio entre dulzor y acidez. Además, casi siempre carecen de semillas. Otras especialidades corsas que merece la pena probar son los migliaccioli, una especie de tortitas con queso, la pulenta castagnina, polenta elaborada con castañas, y la zuppa corsa, una sopa de verduras que recuerda a la minestrone.
La isla también es conocida por su vino, sobre todo el tinto, elaborado principalmente con la uva Nielluccio, que se encuentra en pocos lugares. Esta uva recuerda mucho a la Sangiovese italiana, una potente uva tinta. Otras variedades de uva que se producen aquí en mayores cantidades son la uva tinta Sciarello y la uva verde Vermentino.
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